sábado, 5 de mayo de 2012

Tell me about love - Capítulo 1

Let´s talk about love

Seguidores, compañeros, gente perdida por la red, tú, el del fondo, hoy comenzamos hablando del amor, directamente. En este proyecto, tal y cómo está explicado en el prólogo, se tratará el tema de las relaciones sentimentales desde la completa objetividad de un persona en concreto (conocida como subjetividad) con la ayuda de otros inexpertos de la materia.

Antes de comprender cómo usarlo, manipularlo y no vernos inmersos en un torbellino de sensaciones agonizantes, hemos de seccionar el sentimiento, ver las diferentes partes que lo componen, y a partir de esto, aprender a manipularlo con diligencia y rapidez en situaciones espontáneas.

Traducido: te pongo un par de definiciones, te la lees, y en otro momento hablamos de tácticas.
Comenzamos por la definición. Según la RAE (la organización que dice que pone en el diccionario), amor es
(Del lat. amor, -ōris).
1. m. Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser.
Bien, queda claro que el que escribió esto no tenía un buen día, o tuvo una mala noche, o un desencuentro amoroso. Quiero destacar la frase que se encuentra entre comas - "partiendo de su propia insuficiencia" -. Se supone según esta definición que el amor es una necesidad.

Ley I - El amor es una necesidad. Cómo el aire, el agua o las películas de serie B, necesitamos amor para existir, de manera que nada de negarse a sí mismo. Hablamos de cualquier amor, entre los que encontramos el convencional (de pareja, ya sea heterosexual u otros), el amor propio y otros amores variados y en ocasiones extravagantes, los cuales no van a ser valorados en este capítulo.

Pasemos ahora a otro lugar donde viven a sus anchas las definiciones, mucho más conocido: Wikipedia.
Según el gigante de la información
El amor es un concepto universal relativo a la afinidad entre seres, definido de diversas formas según las diferentes ideologías y puntos de vista.
De aquí podemos sacar que el que escribió esto estaba de mejor humor que el de la RAE. Luego que se quejen de que usamos más Wikipedia que el diccionario...

Además extraemos la segunda ley del amor

Ley II - El amor es universal. Absolutamente. Es irrelevante que seas americano, japonés, argamasillero o marciano (que no murciano, aunque también están incluídos). A menos que seas Mr Norris, este sentimiento te puede afectar, provengas de la Tierra o de Plutón. En algún lugar has de tener un corazoncito, u otro órgano de características similares que se verá prendado de algún otro ser (o de ti mismo) y te hará pasar horas muy felices y muy tristes.

Al final, llegamos a una advertencia. Algunos tal vez estén deseando pasar a otros temas (primeras citas, tácticas, copulación...). Llegarán. Sin prisas. Paciencia. Es la tercera ley.

Ley III - La paciencia es imprescindible en cualquier relación. No hablamos de la paciencia absoluta, hablamos de la paciencia razonable. Si de verdad se quiere (en un sentido mucho más profundo que el superficial "te quiero" que ha devaluado el significado de "querer") se ha de tener una gran capacidad de aguante, de tranquilidad y de espera. Paciencia al soportar todo aquello con lo que no cuentas al declararte y descubres tras un tiempo, y que te propones que no te afectará. Si de verdad hay amor, no será necesario que pienses - "Paciencia" - a menos que sea algo gracioso, humorístico y puntual.



En breve, el siguiente capítulo de "Tell me about love", la guía de inexpertos a inexpertos, solo en Completamente Típico.

lunes, 30 de abril de 2012

Tell me about love - Prólogo

O cuéntame eso que no te quiero preguntar

Llega a Completamente Típico un proyecto titulado "Tell me about love", una guía para chicos sobre el amor, escrita desde la más absoluta (casi) inexperiencia, lo que le aporta un grado de objetividad extinguido en los libros y recetarios de amor comunes.

Basta de gente que te cuenta cómo le fue en sus primeras experiencias y cuál era su plan ideal. Ahora alguien que no se ve influenciado por opiniones personales te cuenta cuál es la táctica perfecta, el plan de una perfecta primera cita, o dónde cortar esa relación que no te gusta sin montar un espectáculo mediático.

En los siguientes capítulos contaremos con la colaboración de otras personas dispuestas a dar su opinión acerca del rompecabezas más antiguo del hombre (o la mujer) retomando las raíces cítricas (adelante, tómate un momento para visualizar un limón... ¿ya?) que pudieron caracterizar a este blog en sus inicios.

Deja de quedar cómo el malo, inexperto o simplemente el que no sabe llevar un relación. Con esta guía no conseguirás absolutamente nada, aunque puedes reírte un rato, o hacer dibujitos en los márgenes de las páginas.

Se acabó el maldecir a ese que creó las primeras citas, el cortejo y esos rollos de las indirectas. Con esta sencilla guía comprenderás al instante que quería decir esa mirada - ¿me guiñó un ojo, o era que le picaba después del encuentro con la manada de mosquitos-tigre?


jueves, 5 de abril de 2012

A mis amigos (III)...

Lectores de cualquier parte, hoy quiero retomar una actividad que inicié hace meses, que consistía en el reconocimiento en vida a las aptitudes, características y demás acompañamiento a aquella persona que se aventure a llamarme "amigo".

Cito ahora un fragmento que publiqué en la primera entrada de esta cadena:
Durante unos instantes, sin venir a cuento, me he planteado lo que significa un amigo. Un amigo es aquella persona que te deja una marca en algún lugar indeterminado. Y me he planteado el hecho de lo triste que me parecía que a los amigos se les reconocieran sus virtudes delante de sus familias, habiéndole dado el pésame, y no durante vida y disfrute de las partes constituyentes de la amistad.

Por ello, me he decidido a cambiarlo, con aquello que yo pueda hacer, y por esto, queda inaugurada la sección  de "A mis amigos...", donde espero mencionar, recordar antes de tiempo y expresar mi gratitud a todas aquellas personas que en los últimos meses se han ido haciendo un hueco, algunos de manera involuntaria, en ese estante en el que guardo a mis más preciados amigos.

Tal vez, si tú sales mencionado, pienses que lo que tenemos no es amistad, o que no es únicamente eso, tal vez te preguntes si lo que acaso compartimos no es una cierta enemistad, tal vez no quieras aparecer (en cuyo caso, te ruego que me lo comuniques), tal vez pienses que nos conocemos muy poco, o que no te he sabido valorar. Espero que en cualquier caso sepas actuar en consecuencia.
Tal vez se me olvide mencionarte. Ojalá no te enfades.
Esto no suena bien, aun así, quiero ponerlo: Si murieras, lo expuesto en tu respectiva publicación estaría muy cerca de lo que en el momento de escribirlo pienso de ti. Hasta entonces, disfrutemos lo que podamos.

Pues bien, ahora que ya conoces el cometido de esta algo macabra jugada, tal vez te interese saber que en este caso el presunto fallecido será Juan.



Queda decir antes de comenzar que la canción, creo que del gusto de Juan, que el título refleja algo que tener presente: la gente cambia, y lo que escriba ahora, o halla expresado antes, puede cambiar, balancearse, por lo que lo que pensaba cuando escribí sobre ciertos temas puede variar.

A mi amigo, Juan...

De nuevo, pongámonos en situación. Juan ha fallecido. Un terrible accidente de tráfico. No se ha podido recuperar el cadáver. Al parecer se ha disuelto al entrar en contacto con la lluvia. Los equipos de rescate solo han recuperado una pequeña muestra blanca, encontrada en charcos cercanos a los que misteriosamente acudían gaviotas. Se trata de NaCl.

Bueno, vale, más suave. Juan ha fallecido y el motivo aun no se conoce. Nos encontramos en su entierro. Naturalmente, se trata de un entierro muy oscuro, muy frío. Llueve agua de mar. La gente trae algunas pertenencias de Juan que albergan la esencia del difunto. Unas natillas caducadas, muestras de hongos, productos de los gemelos artesanos y unos cuantos Rabbids.

La gente se dispone a decir unas palabras por Juan. Mi turno:
Juan... Juan era un tío excelente. Una gran persona. Duro por fuera, y mullido a abierto por dentro. A pesar de su carácter frío, de creerse una persona distante, muchos conocemos que era un hombre simpático, y que sus constantes intentos por sonreír podrían haber dado fruto si hubiera tenido más tiempo...
Su fuerte personalidad, perseverancia y determinación eran puntos de agarre para aquellas personas que éramos sus amigos, y su conducta será recordada por lo impecable de su comportamiento.
Bueno Juan, algunos de los párrafos que le dediqué a Javi estaban referidos a los dos (los párrafos en lo que hablaba de "vosotros", y no aparecían las palabras "alegría", "sentido del humor" y "sonrisa"). No quiero copiarlos, porque sería algo descortés, aunque sí te digo que tienen el mismo sentido para ambos.

¿Que decirte? Que cómo ya sabes, has aportado a mi vida un punto de vista nuevo, mucha amistad y humor, y nociones básicas de biología (o cómo destrozar un ser vivo en nombre de la ciencia biológica). Que has sido un elemento muy importante en los últimos meses es un hecho.
Quería agradecerte el ser esa persona atípica que se establece cómo uno de mis amigos, y el que gracias a ti y a tu hermano no he abandonado completamente Pantalla de Neón (¿ves?, aquí también hago referencias al otro gemelo, cómo en su entrada).

Eres una persona salada, un auténtico "soy el borde que no es borde". Me has dado tu opinión de persona un año mayor en alguna ocasión, y también es algo que te quería agradecer.

Ha sido un placer conocerte, tenerte cómo amigo y poder disfrutar de tu, en ocasiones, silenciosa compañía.
Espero que lo sigas siendo mucho tiempo.

A la espera de la primera sonrisa, neonenHD.

Despertar...

Quedaba cinco minutos. Sonó el vapor soltado sobre cabina. El tren estaba a punto de partir. ¿A punto de partir a donde?

Ni idea, al abrir los ojos y desaparecer la metáfora, se encontró de nuevo acostado, en su cama, junto a ella.
Una noche agitada, mucho paseo, mucha calle, mucho coger la mano, fuegos de artificio, risas, calor, bebida, llegar a casa y no dormir.

Respiró lentamente. No quería despertarla. Con apenas cuatro horas de sueño, y un perfecto día nublado, húmedo, iluminado por el sol indirecto que se filtraba entre las nubes, el descanso era la receta del día.

Se incorporó sobre la almohada, respiró su aroma, acarició su pelo con los dedos, y terminó de levantarse.
Ella se movió ligeramente. Él se acercó a la ventana, alzó los brazos y notó cómo uno a uno todos sus músculos recuperaban la movilidad. Los notaba, vivos, debajo de la piel.

Apoyando el codo en el marco, miró a través del cristal. La calle, vestida de sábado, aun húmeda por la lluvia nocturna, se sustentaba bajo el manto de nubes gracias al vapor que emitía el asfalto y la piedra caliente. La gente, apresurada, cruzaba la calle, leía el periódico, o simplemente caminaba en alguna dirección. Niños, familias paseando, animales de compañía, solitarios empedernidos y viajeros con mochila por casa.

Saldría por el desayuno, café, croissants, chocolate caliente, todo servido en bandeja de plástico común, con el logotipo de alguna cadena de cafeterías. Volvería corriendo, con una sonrisa por matrícula, puerta del edificio, escalones, primer piso, segundo, tercero, recibidor, llaves, -"buenos días"- y primer beso de la mañana.

Cuando despertó, buscó su pelo con los dedos, y encontró un sobre. Se incorporó, abrió el sobre y dentro encontró una tarjeta escrita a mano con tinta negra, en la que se podía leer - Te veo esta noche -.

Sonrió.


martes, 14 de febrero de 2012

Locura...

Hoy es 14, San Valetín. Parejas, flores, y perfume en el ambiente.

- Me he enamorado. Y estoy perdidamente enamorado de la forma más sencilla que conozco. Hoy tenía un aire, un algo diferente que flotaba a su alrededor.
Un halo de misterio que la hace más atractiva, sensual desde punta de sus dedos.
La amo sin reparo, ¿y sabes como me ha respondido?
Con la más absoluta indiferencia. No lo sabe. No sabe nada de esto. Mi pasión muere en secreto, bajo candado de escarcha.
Grito, y no me oye.
No sabe quien soy.
No me conoce. -

- ¿Y porqué no le dices nada? -

- ¡No! No quiero que lo sepa. ¿Y arruinar esta bonita relación de desconocimiento mutuo? Sin discusiones, sin regalos, sin olvidos... ¿Porqué perder eso?

- Bueno, ¿y quién es? -

- No lo se, aunque te aseguro que la amo con locura. -

jueves, 5 de enero de 2012

Publicidad de época...

Son las siete de la mañana, de un cinco de Enero particularmente primaveresco. En el exterior de la casa, estilo rústico, madera vieja y mojada, un manto blanco de nieve recién posada decora todo el valle.

Lentamente la actividad silenciosa del pueblecito de montaña se torna mañanera, con sonidos de ruedas de carro, animales que despiertan tras una gélida noche de nieve que cae sosegadamente, y una anciana que no aparenta su edad centenaria abriendo una pequeña ventana de marco de madera al frescor invernal que se cuela junto al aroma de tierra limpia.

El rocío de una hoja interfiere en el recorrido de un rayo de sol, que contrariado, curva su trayectoria hasta incidir con suavidad en la mejilla de una chica, de más o menos tu edad, con una sonrisa única y especial (¿y cual no lo es?)

Ella se lleva la mano a la cara. Tiene una mano fría. Se acaricia la mejilla, sonríe inocentemente, y se levanta.
Abandonando el banco de piedra, se dispone a caminar, y camino a la orilla de la laguna, una abubilla interrumpe su vuelo para echarle una mirada a tan agraciada criatura; que al igual que la abubilla interrumpe su camino, y convierte la mirada del ave en recíproca.

Camino abajo un cúmulo de nieve posada sobre una rama se desliza suavemente, hasta que con un brusco giro termina por caer al suelo. La nieve caída dibuja una forma irregular en el suelo, y en el mismo suelo se transforma en un poco más del manto blanco que acompaña a nuestra chica.

La forma del suelo se torna rectangular, hasta aparecer un frasco de perfume de la nada.

Mierda... maldita publicidad intensiva de Navidad. Que ganas tengo de que desaparezcas.


viernes, 16 de diciembre de 2011

El puerto de invierno...

Para acompañar...

Serenata by Atomic Lab Mix on Grooveshark


El puerto de invierno...

Está poniéndose el sol en el puerto... es un sol de invierno, un sol que calienta corazones de hielo y deja frío el aire de la gran ciudad.
Y éste aire, frío, gélido incluso, forma nubes de mil y una formas al separar los labios, emanando el suspiro de un largo beso hasta la lejanía de las primeras estrellas que comienzan a aparecer, en un cielo invernal, apenas pasado el mediodía.
Y es aquí, en el puerto de ciudad, donde el aire es más frío, el abrazo es más sentido, y más cálido. Los dos amantes comparten el calor, comparten el momento, mientras una gaviota extraviada contempla desde un mástil de velero a la pareja, deleitándose con las nubecitas que sueltan al final de cada beso, que desparecen al ascender atravesando los últimos haces de luz del sol extinto.

Los amantes se miran, con ternura, viendo el uno en los ojos del otro cada momento feliz vivido, cada instante compartido, cada fugaz visión de resquicios de desbordante alegría. No está llorando porque esos momentos han pasado. Llora porque sabe que sólo son los primeros de lo que está por llegar.